Soluciones para mejorar la eficiencia energética
Resideo ofrece soluciones para cumplir los requisitos legislativos en el sector residencial.

Ahorro de gastos
Al instalar un sistema de distribución y contabilidad térmicas, es posible asignar a cada vivienda del condominio un sistema de distribución de gastos en función del consumo real. Gracias a la autonomía de gestión, el calor se utiliza solo donde y cuando se necesite, lo que implica un menor gasto en la factura. Así se pasa de una división de los costes de calefacción basada en las milésimas a otra basada en el consumo.

Eficiencia energética
Es posible intervenir en edificios existentes con la instalación de sistemas de distribución, mientras que los edificios nuevos ya están equipados con módulos de usuario para la medición directa de calor y agua sanitaria. La contabilidad es también el primer paso hacia una eficiencia energética plena, ya que, al condicionar la medida del ahorro a un comportamiento adecuado del usuario individual, le anima a realizar todas las reformas del inmueble que sean necesarias. Los sistemas de medición por radiofrecuencia, gracias a su instalación sencilla, también facilitan la actualización del sistema.
Se basa en la evaluación de la energía relativa al uso, midiendo los parámetros de proporcionalidad con la emisión térmica (temperatura superficial del cuerpo calefactor y temperatura ambiente), una vez conocida la potencia calorífica nominal del cuerpo calefactor. La medición indirecta se utiliza principalmente en sistemas de distribución "verticales" con columnas ascendentes, mediante la instalación de un divisor en cada cuerpo de calefacción. De hecho, en estos sistemas no es posible encontrar un único punto de entrada de agua que sirva a los distintos radiadores de la misma vivienda. Por lo tanto, como no es posible medir con sistemas directos (medidores de calor), se usan asignadores de calor montados en cada cuerpo de calefacción individual. Cada radiador también se equipará con una válvula termostática o un sistema electrónico de control de zonas a través del cual será posible decidir por uno mismo el nivel de temperatura óptimo para esa zona, optimizando así el confort ambiental y los costes.

Se basa en la medición de la energía térmica extraída de cada usuario, mediante la medición, directamente en el fluido termovector, de los parámetros que definen la diferencia de entalpía entre la entrada y la salida del circuito del usuario. La medición directa puede utilizarse en sistemas con distribución horizontal, caracterizados por un único circuito de suministro para cada unidad del edificio. Por lo tanto, es especialmente adecuado para:
- nuevos edificios con sistemas distribuidos horizontalmente;
- edificios existentes que se están renovando: En estos sistemas, es posible encontrar un único punto de entrada de agua y así conocer la energía consumida por todo el piso.

Medición indirecta
Para la asignación térmica indirecta, Honeywell Home ofrece soluciones en función de la estructura del edificio de apartamentos y del tipo de necesidades del usuario. Una vez instalados los asignadores en cada radiador individual, envían información detallada sobre el estado de funcionamiento a intervalos regulares: consumo, anomalías, alteraciones. La información se lee a través de unidades de recogida de datos situadas fuera de los pisos -normalmente en el hueco de la escalera (sistema AMR)- o a través de un sistema walk-by que permite a un operador leer los asignadores directamente con una antena móvil mientras camina por los huecos de la escalera. Los distribuidores electrónicos de Honeywell Home instalados en los radiadores permiten distribuir correctamente el consumo de cada vivienda. Para una correcta medición, los dispositivos Honeywell Home están equipados con 2 sensores, uno dedicado a medir la temperatura del radiador y el otro a la temperatura ambiente.
Medición directa
Honeywell Home ofrece una completa gama de medidores y caudalímetros, todos los cuales comparten la capacidad de ser leídos a distancia por vía inalámbrica, con las interfaces adecuadas, por los programas informáticos normalmente utilizados en el “reparto de calor indirecto” o con sistemas cableados basados en el bus. Esto permite gestionar edificios que tienen repartidores de calor y medidores instalados en su interior, lo que permite su lectura completa.